El doctor José Francisco Valdivia Núñez
Dr.
Jesús Baldomero Valdez Herrera
Arequipa, 28 de noviembre de 2015.
El Doctor José Francisco Valdivia
Núñez nació en el año de 1926 en Juli, en Puno, pero de padres y ancestros del
Valle de Tambo, en la provincia de Islay, en Arequipa de tal suerte que de él
se puede afirmar con toda seguridad que es un tambeño nacido en Puno.
Fueron sus padres el señor don José
Eulogio Valdivia Zaconet y la señora doña Aurora Núñez Ávila nacidos y que vivieron
en La Curva, en el distrito de Cocachacra, que son bellos pueblos del Valle de
Tambo, a orillas del rio del mismo nombre y muy cercanos al mar, a Mollendo y
también a la línea del famoso ferrocarril que partiendo del puerto de Islay
venía a Arequipa, llegaba al Cusco y a la selva de la Convención y por la vía
de Puno se conectaba con Bolivia y Argentina llegando así al Océano Atlántico.
Como muchas familias de apellido
Valdivia del Valle de Tambo y de Moquegua son ellos descendientes del que fuera
el famoso Dean don Gualberto Valdivia, de trascendental actuación en la
Arequipa de los años de 1800 con ideas verdaderamente innovadoras y liberales
además de ser un visionario y uno de los padres de la Facultad de Medicina de
la Universidad Nacional de San Agustín, circunstancia poco conocida y que ocupa
un espacio muy importante en la Historia de la Medicina de Arequipa.
Sus estudios de educación primaria
los realizó en Juli y los de secundaria en los colegios nacionales Brigadier
Mateo Pumacahua y San Carlos de la ciudad de Puno, ingresando luego a la
Universidad Nacional de San Antonio Abad del Cusco donde estudió el primer año
de Premédicas, mientras que el segundo año lo hizo en Arequipa en la
Universidad Nacional de San Agustín; eran los años muy difíciles para estudiar
medicina en el Perú sobre todo para los jóvenes que vivían fuera de Lima, pero
aun así el Doctor Valdivia iniciaba en el año de 1948 sus estudios en la
Facultad de San Fernando en la Universidad Mayor de San Marcos y se graduaba en
el año de 1954 siendo que su promoción lleva el nombre de Juan Werner y médicos
como los doctores Hugo Delgado Flores y Benigno Lozada Stanbury fueron sus
compañeros de estudios y de graduación.
Después de trabajar en Ica viene a
Arequipa en el año de 1957 e inicia sus actividades médicas en el Hospital
Obrero, en el servicio de Enfermedades Broncopulmonares con el doctor Otto
Friederich Pedraz donde permanece hasta el año de 1960, de donde al salir al
Hospital General de Arequipa los doctores Javier Llosa García y el doctor
Carlos Neuenschwander Landa, el doctor Valdivia pasa al Servicio de Medicina
cuyo Jefe era el Doctor Manuel Ávila Pantigoso y donde estaban médicos como los
doctores Alfredo Salas Benavides, Jorge Núñez Cornejo, Eliud Arrieta Barriga y
Raúl Lazarte Cárdenas. Ya en el año de 1966 con la salida de las madres
religiosas del Hospital Obrero, se forma el Servicio de Medicina B ocupando el
área que dejaban las madres y que con cuatro camas era utilizado como “sala auxiliar
de emergencia”.
Poco después de que yo ingresara a
trabajar el año de 1972 al Hospital Obrero, fui destinado por el doctor Manuel
Ávila al Servicio de Medicina B, donde fue en realidad un honor estar al lado
de los doctores José Francisco Valdivia quien era el Jefe de este nuevo
Servicio, de Raúl Lazarte Cárdenas y de José Luis Arenas Eroles y con
enfermeras como la señoras Nayda Luque Zúñiga Aída Suarez, Nora Cornejo y por
poco tiempo con la señora Laura Macedo Castro quien ya había sido enfermera en
años anteriores en este servicio, y la señora Julia Bellido Mayurí.
Son recordadas auxiliares de enfermería las
señoras Doris Cáceres, Ana María Rubio, Nelly Escalante y el que fuera después el
odontólogo doctor Felipe Vázquez.
El doctor Valdivia fue Director
nombrado del Hospital Obrero en el año de 1980 hasta su jubilación en el año de
1988 siendo además profesor de Medicina de la Facultad de Medicina de la
Universidad Nacional de San Agustín y presidente del Cuerpo Médico del Hospital
Obrero.
Recuerda con mucho afecto y
especial deferencia y admiración al doctor Raúl Lazarte Cárdenas a quien lo
considera como un médico de mucha calidad humana y además como el amigo de toda
su vida; el doctor Manuel Ávila Pantigoso, es otro de los médicos inolvidables
sobre todo por esas raras cualidades que eran muy propias de él y que son muy
difíciles de ser encontradas en los profesionales de hoy en día.
Conocer y trabajar con el doctor
José Francisco Valdivia Núñez representó para los que lo conocimos un verdadero
honor. Su calidad humana, su sencillez, su permanente buen humor y su fácil
raciocinio hacían de la medicina una constante fuente de renovación en nuestra
formación médica y es por eso que con otros grandes maestros arequipeños de la
medicina ocupa el doctor Valdivia un lugar preferente y merecedor de una
inmensa gratitud de todos los profesionales que estuvimos cerca de él.
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